Eloy Gonzalo, señorial y con recuerdos cubanos.

Ancha, recta y señorial, pero no muy larga -unos 40 números-, la calle de Eloy Gonzalo es una vía esencial en el ensanche decimonónico de Chamberí: de este a oeste, une dos núcleos viales esenciales como son, en un extremo, Santa Engracia y General Martínez Campos, y, en el otro, Bravo Murillo, Fuencarral y San Bernardo. Eso lo sabemos todos, claro. Pero, para empezar por sus inicios y comprender un pedazo de historia de España y de Madrid, hay otro dato que no muchos saben: como nos recordaba Pedro de Répide en su callejero, hace 100 años, esta calle fue anteriormente el primigenio paseo de La Habana.

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Por encargo realizado de la propiedad debido al I.E.E
desfavorable en cuanto a la accesibilidad. Se van a definir y valorar las obras necesarias para la mejora del edificio, encaminadas a cubrir todas las deficiencias en esta materia, además de aquellas necesarias para favorecer la inclusión social, eliminando las barreras arquitectónicas y adaptando los espacios para el uso de personas con movilidad reducida y otra disfunción funcional. Las deficiencias respecto a la accesibilidad en el edificio se encuentran, por un lado, en el escalón de
entrada del portal 31 y a lo largo del rellano de este mismo portal con desniveles entre las crujías con escalones que dificultan el acceso hasta el patio central.
Por otro lado, el acceso a la escalera interior en la crujía 5 desde el patio central cuenta con otro escalón de bajada para salvar el desnivel de otros dos escalones de subida en el rellano de dicho portal.

Dadas las características de la intervención no se modificarán los elementos de cimentación existentes
en el edificio ya que se entiende consolidado, pero se añadirá una nueva zapata de 1x1x1 m para la sustentación del nuevo pilar que se colocará en la escalera interior. La zapata será de hormigón HA – 25/ B/ 40/ II a con armado de acero corrugado B- 500/S.

La intervención estructural consistirá en la colocación de una nueva estructura debido a la demolición de una parte del muro de carga ampliando el hueco de acceso al edificio. Se colocará un pilar con 2 UPN de 240 al que se soldarán mediante cartelas y por debajo de la viga existente otras dos nuevas vigas que unirán este con el muro de carga a ambos lados del pilar, serán dos IPN de 180 paralelas anclados a una placa metálica que se sostiene sobre el muro con mortero y unos anclajes metálicos insertados en la fábrica de ladrillo para minorar
esfuerzos cortantes.

Se levantará la puerta metálica del acceso al edificio para su posterior colocación que será unos 10 cm más baja, tras el rebaje o retirada del peldaño de entrada que serán desmontados a mano.

Será demolido el suelo del portal y la solera de hormigón ligeramente armado con mallazo hasta el nivel de la vía pública por el que se realizará la entrada. Se formarán dos nuevas rampas que salven el desnivel de la entrada con el rellano del edificio y más adelante con la salida al patio principal, construidas mediante hormigón armado y maestras de fábrica de ladrillo macizo que tendrán una pendiente menor al 10%.
Posteriormente se volverá a solar el rellano con una baldosa gres antideslizante similar al existente en e resto de zonas comunes del edificio a elección de la propiedad recibido con mortero de cemento. Se colocará la puerta de entrada abatible con patillas para recibido a obra, herrajes de colgar y cerradura con llave de seguridad y se cerrará el hueco con un bastidor que completará la puerta original.
Se demolerá parte del muro de carga interior que posteriormente será reforzado con un pilar, para ello se abrirá un hueco en el muro sobre el que apoyarán las nuevas vigas y se apuntalará la zona.